El jabón facial de Rosa Mosqueta y Arcillas que os presentamos es todo un regalo para la piel del rostro. A las beneficiosas propiedades del Aceite de Rosa Mosqueta se unen la manteca de karité aportando su poder natural para nutrir y regenerar la piel y las arcillas blanca y roja. El resultado es un jabón facial apto para todo tipo de piel pero en especial, para cutis seco, maduro y sensible.
La Rosa Mosqueta es un arbusto
silvestre de ramas delgadas y repletas de espinas, cuyos tallos y ramas están
llenos de flores blancas y rosadas, de la zona de la Patagonia, Chile y Perú
. Cuando
sus pétalos caen, la planta desarrolla un fruto rojizo de forma ovalada,
repleto de unas enormes semillas (constituyen el 70% de su peso), y será de
ellas de las que se extraiga el aceite, considerado hoy día como uno de los
regeneradores dérmicos más poderosos que existen. Sus beneficios son el
resultado de su alto contenido en ácidos grasos esenciales poliinsaturados: Linoleico
44-49% y linolénico 28-34%, que están directamente
relacionados con la síntesis del colágeno. Estos ácidos son sustancias nobles,
indispensables para zonas donde existen altos índices de proliferación de
células nuevas, como es el rostro.
El aceite de Rosa Mosqueta es
uno de los productos que mayor interés ha despertado en el campo de la Dermatología,
la Nutrición y la Cosmética, debido a que sus usos y
aplicaciones van desde la regeneración de tejidos dérmicos dañados, hasta el
retraso en la aparición de las líneas de envejecimiento prematuro, la
prevención en la formación de arrugas y la recuperación de pieles afectadas por
quemaduras o incluso radioterapia.
Mención especial también requieren las arcillas que enriquecen este jabón y que posibilitan su uso no sólo como limpiador facial sino también como desmaquillante. La arcilla es un potente limpiador, por eso se utiliza en cosmética desde tiempos antiguos, para embellecer, para preservar y para curar. Las arcillas ayudan a dejar la piel suave y lisa, combaten las manchas y ayudan en la regeneración celular de los tejidos.
La arcilla blanca, también conocida con el nombre de caolín, tiene un alto poder desintoxicante, antibacteriano y cicatrizante. La arcilla blanca es un aliada perfecta para eliminar impurezas de nuestra piel y ayudarla en su regeneración celular. Es recomendable para pieles secas, aporta luminosidad y deja la piel lisa y suave, también ayuda a aclarar las manchas de la piel.
La arcilla roja debe su color rojizo a un mayor contenido de hierro y aluminio, lo que le otorga propiedades astrigentes, antiinflamatorias y descongestivas. La arcilla roja actualmente es conocida como la arcilla más curativa, pues provee a la piel de una excelente regeneración celular. El uso de la arcilla roja está más recomendado para pieles sensibles y delicadas con problemas de dermatitis.
Ingredientes: aceites de oliva virgen, coco, palma-bio, rosa mosqueta; mantecas de karité y cacao, cera virgen de abejas, hidróxido de sodio, agua, arcilla blanca y arcilla roja. Colorante natural proveniente de la arcilla. Sin aromas.
María una maravilla de jabón, ahora mismo acabo de llegar del campo de recoger escaramujos como los de tu foto...ando pensando a ver que utilidad los doy.
ResponderEliminarUn saludo ^__^
Gracias Ana por pasarte por el blog y comentar.
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